Este caldo es esencial en la alimentación tradicional de los japoneses, una de las poblaciones más sanas del planeta. Por algo será.
Ingredientes:
- pasta de miso
- jengibre fresco
- ajo
- zanahorias
- ají
- miel de abejas
- limón
- tamari (o salsa de soya)
- fideos de arroz
- cebolla larga
- tofu
Preparación:
Para preparar el caldo, usa 1 litro de agua, 4 cucharadas de pasta de miso (que es la soya fermentada y se consigue en tiendas naturistas; la cantidad dependerá de la marca), 4 a 5 cm de jengibre fresco, 3 dientes de ajo, zanahorias en trozos, ají según el gusto, 1 cucharadita de miel de abejas, el jugo de un limón, tamari (o salsa de soya baja en sodio).
Para servir la sopa: 4 porciones de fideos de arroz, vegetales al gusto picados finamente: cebolla largaal menos, y otras opciones, como espárragos, hongos fritos, cilantro, pok choy, arvejas, huevo cocido al gusto y semillas de ajonjolí.
Calienta el agua, agrega el jengibre en láminas, los dientes de ajo machacados, el ají y las zanahorias. Hierve lentamente hasta que las zanahorias se ablanden (unos 15 minutos). Si lo deseas, puedes desechar el jengibre y los dientes de ajo. Apaga el fuego y añade la pasta de miso, el jugo de limón y el tamari.
Cocina los fideos según las instrucciones en el empaque (muchas veces basta con ponerlos en agua hervida por unos 4-5 minutos). Divide los fideos en 4 tazones. Añade a cada plato los vegetales deseados.
Agrega el caldo bien, bien caliente y rocíalo con semillas de ajonjolí y cilantro.