Grelos son las hojas frescas de los rábanos o nabos. Es decir, se encuentran en cualquier huerto. En las ciudades, pueden sustituirse por arrúgula, achicorias, radicchios, radichetas, mostazas, acedera, diente de león o cualquier otra hoja amarga.
Esta deliciosa receta no tiene misterio: es un pescado de agua dulce y fría, hecho al horno y servido en una cama de hojas que tienen mucho sabor.
Ingredientes:
- 2 porciones (de 125 gramos) de salmón silvestre (o trucha), sazonado con ½ cucharadita de sal marina
- 1 manojo de grelos u otras hojas lavadas, sin tallos y partidos a lo largo
- 2 dientes de ajo, cortados en rodajas
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 taza de quinua
Preparación:
Calienta el horno a 200 grados Centígrados. Aparte, calienta una sartén y agrega 1 cucharada de aceite de oliva. Cuando el aceite esté caliente, agrega el pescado y dóralo por un lado durante 3 minutos. Dale la vuelta y dora el otro lado durante 1 minuto, luego retíralo de la sartén. Colócalo en bandeja de horno y hornea durante 7-8 minutos.
Escurre el exceso de aceite de la sartén y vuélvelo a calentar añadiendo el resto del aceite de oliva, para saltear el ajo durante 1 minuto. Baja el fuego a medio. Pon los grelos en la sartén, agrega ¼ de taza de agua, cubre y deja al vapor durante 2 minutos. Sirve las verduras en un plato con el pescado encima. Sirve la quinua como acompañamiento.
Del recetario del programa Clean, Alejandro Junger