La mitad de las personas refieren que duermen mal. Sus problemas con el sueño van desde una noche ocasional de sueño regular hasta un insomnio severo. No obtiene el descanso necesario. Para algunas personas es sólo una molestia pasajera y para otros un agravante de sus dolencias severas.
Unos de los aspectos más simples a considerar para mejorar la calidad del sueño son tu rutina para diaria para conciliarlo y las condiciones en que duermes. Se puede llamar la higiene del sueño: son casi todas recomendaciones de sentido común, pero te sorprendería saber que casi todas las personas encuentran que poner en práctica alguna de ellas les ayuda decisivamente a dormir mejor.
Las agrupamos así:
- Factores de la rutina que inciden en el sueño
- Factores que alteran o interrumpen el sueño (disruptores)
- Factores que evitar la inducción de un buen sueño (inductores)