¿Por qué algunos adultos lastiman a los niños?
No existe una respuesta simple que ayude a explicar por qué algunos padres o adultos abusan de los niños.
Al igual que con muchas cosas, los factores que conducen al abuso infantil son complejos y a menudo se entrelazan con otros problemas. Estos problemas pueden ser mucho más difíciles de detectar y comprender que el abuso en sí.
¿Qué aumenta el riesgo en una persona de abusar de un niño?
- antecedentes de abuso o negligencia infantil durante su propia infancia
- tener un trastorno por uso de sustancias
- condiciones de salud física o mental, como depresión, ansiedad o trastorno de estrés postraumático (TEPT)
- malas relaciones entre padres e hijos
- estrés socioeconómico debido a problemas financieros, desempleo o problemas médicos
- falta de comprensión sobre el desarrollo básico de la infancia (esperar que los niños sean capaces de realizar tareas antes de estar listos)
- la falta de habilidades parentales para ayudar a hacer frente a las presiones y luchas de criar a un niño
- falta de apoyo de familiares, amigos, vecinos o la comunidad
- cuidar a un niño con discapacidades intelectuales o físicas que dificultan la atención adecuada
- estrés familiar o crisis causada por violencia doméstica, confusión de pareja, separación o divorcio
- problemas personales de salud mental, incluyendo baja autoconfianza y sentimientos de incompetencia o vergüenza
Los adultos que abusan de los niños también pueden mostrar ciertos signos o comportamientos, como:
- ignorar o negar el comportamiento problemático, los cambios o las dificultades de un niño
- usar un lenguaje que muestre que ven al niño como inútil o pesado
- exigencias de rendimiento físico o académico que el hijo no puede lograr
- pedir a los maestros u otros cuidadores que usen castigos severos si el niño se porta mal
- rara vez demuestran afecto físico al niño
- mostrar hostilidad hacia el niño, especialmente a la luz del mal comportamiento
- mostrar poca preocupación por su hijo
¿Qué hacer si temes hacerle daño a un niño?
Ser padre puede ser una experiencia alegre, significativa y a veces abrumadora. Puede haber ocasiones en que tus hijos te empujen al límite. Puedes sentirte impulsado a comportamientos de los que normalmente no pensarías que eres capaz.
El primer paso para prevenir el abuso infantil es reconocer los sentimientos que tienes. Si tienes miedo de abusar de tu hijo, ya has alcanzado ese límite importante. Ahora es el momento de tomar medidas para evitar cualquier abuso.
Primero, retírate de la situación. No respondas a tu hijo durante este momento de ira o ira. Aléjate.
Luego, usa uno de estos recursos para encontrar formas de navegar sus sentimientos, emociones y los pasos necesarios para manejar la situación.
Recursos para prevenir el abuso infantil
- Llama a tu médico o terapeuta. Estos proveedores de atención médica pueden ayudarte a encontrar ayuda inmediata. También pueden derivarte a recursos que podrían ser útiles, como clases de educación para padres, asesoramiento o grupos de apoyo.
¿Qué hacer si sospechas que un niño está siendo víctima de maltrato?
Si crees que un niño que conoces está siendo maltratado, busca ayuda inmediata para ese niño.
Cómo denunciar el abuso infantil
- Llama a la policía. Si temes que la vida del niño esté en peligro, la policía puede responder y sacar al niño de la casa si es necesario. También alertarán a las agencias locales de protección infantil sobre la situación.
- Llama a un servicio de protección infantil. El ICBF puede intervenir con la familia y llevar al niño a un lugar seguro si es necesario. También pueden ayudar a los padres o adultos a encontrar la ayuda que necesitan, ya sean clases de habilidades para padres o tratamiento para un trastorno por uso de sustancias. Tu departamento local de recursos humanos puede ser un lugar útil para comenzar.
¿Qué es el abuso infantil?
El abuso infantil es cualquier tipo de abuso o negligencia que daña a un niño. A menudo es perpetrado por un padre, cuidador u otra persona que tiene autoridad en la vida del niño.
5 categorías de abuso infantil
- Abuso físico: golpear o cualquier cosa que cause daño físico
- Abuso sexual: molestar, manosear o violar a un menor
- Abuso emocional: menospreciar, degradar, gritar o retener la conexión emocional
- Abuso médico: negar servicios médicos necesarios o crear historias ficticias que pongan en riesgo a los niños
- Negligencia: retener o no proporcionar atención, comida, vivienda u otras necesidades básicas
El abuso infantil casi siempre se puede prevenir. Requiere un nivel de reconocimiento por parte de los padres y cuidadores. También requiere el trabajo de los adultos en la vida de un niño para superar los desafíos, sentimientos o creencias que conducen a estos comportamientos.
Sin embargo, este trabajo vale la pena. Superar el abuso y la negligencia puede ayudar a las familias a fortalecerse. También puede ayudar a los niños a reducir su riesgo de complicaciones futuras.
Datos sobre el abuso infantil en Estados Unidos
- Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), 676,000 niños fueron abusados o descuidados en 2016 en los Estados Unidos. Pero muchos más niños pueden haber sido dañados en episodios de abuso o negligencia que nunca se informaron.
- Alrededor de 1.750 niños murieron como resultado de abuso y negligencia en 2016, dice el CDC.
- La investigación estima que 1 de cada 4 niños experimentará algún tipo de abuso infantil durante su vida
- Los niños menores de 1 año tienen más probabilidad de ser víctimas de abuso infantil
Consecuencias del abuso durante la infancia
Un estudio de 2009 examinó el papel de una variedad de experiencias infantiles adversas sobre la salud en adultos. Experiencias incluidas:
- abuso (físico, emocional, sexual)
- presenciar violencia doméstica
- separación parental o divorcio
- crecer en un hogar con familiares que tenían problemas de salud mental, trastornos por consumo de sustancias o fueron enviados a prisión
Los investigadores encontraron que aquellos que informaron seis o más experiencias adversas en la infancia tenían un promedio de vida 20 años más corto que aquellos que no tuvieron estas experiencias.
Las personas que fueron abusadas de niños tienen más probabilidades de repetir el ciclo de comportamiento con sus propios hijos. El abuso o negligencia infantil también puede conducir a trastornos por uso de sustancias en la edad adulta.
Si sufriste abuso de niño, estas consecuencias pueden parecerte deprimentes. Pero recuerda, la ayuda y el apoyo están disponibles. Puedes sanar y prosperar.
El conocimiento también es poder. Comprender los efectos secundarios del abuso infantil puede ayudarte a tomar decisiones saludables ahora.
¿Cómo detectar las señas del abuso infantil?
Los niños que sufren abusos no siempre se dan cuenta de que no tienen la culpa del comportamiento de sus padres u otras figuras de autoridad. Pueden intentar ocultar algunas de las pruebas del abuso.
Sin embargo, los adultos u otras figuras de autoridad en la vida del niño, como un maestro, entrenador o cuidador, a menudo pueden detectar signos reveladores de posible abuso.
Señales de abuso o negligencia infantil
- cambios en el comportamiento, que incluyen hostilidad, hiperactividad, enojo o agresión
- renuencia a abandonar actividades, como la escuela, deportes o actividades extracurriculares
- intentos de huir o salir de la casa
- cambios en el rendimiento en la escuela
- ausencias frecuentes de la escuela
- retirada de amigos, familiares o actividades habituales
- autolesión o intento de suicidio
- comportamiento desafiante
Tu puedes detener el ciclo
La curación es posible cuando los adultos y las figuras de autoridad encuentran formas de ayudar a los niños, a sus padres y a cualquier persona involucrada en el abuso infantil.
Si bien el proceso de tratamiento no siempre es fácil, es importante que todos los involucrados encuentren la ayuda que necesitan. Esto puede detener el ciclo de abuso. También puede ayudar a las familias a aprender a prosperar creando una relación segura, estable y más enriquecedora.
Referencias
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